Los Cimientos de una Visión
Todo comenzó cuando Carlos Mendoza, tras años trabajando en el sector financiero tradicional, se dio cuenta de una realidad preocupante: el 68% de los españoles carecía de conocimientos financieros básicos. Esta brecha no era solo estadística, sino que representaba millones de familias tomando decisiones económicas sin las herramientas adecuadas.
En una pequeña oficina en Las Palmas de Gran Canaria, nació dravenilthora con una misión clara: democratizar la educación financiera. Los primeros meses fueron intensos, creando contenido educativo que fuera riguroso pero comprensible, relevante pero no abrumador.